JUSTIFICACIÓN DE LA ADAPTACIÓN: “El hombre de la piel de oso”
He adaptado el cuento de “El hombre de la piel de oso”, para niños de edades comprendidas entre 4 y 6 años, ya que debo de aprender a adaptar cuentos para que más adelante, pueda emplear estas herramientas con mis futuros alumnos. He decidido adaptar este cuento a estas edades, debido a que según las características evolutivas, los niños entre los 4-6 años, todavía les llaman la atención las historias imaginarias, aplicando la fantasía en cuanto a los personajes. Además, los niños empiezan a entender los sucesos de castigo y recompensa.
En esta adaptación del cuento “El hombre de la piel de oso”, he querido respetar el tema de la historia, pero cambiando el desenlace y los personajes por animales y adjetivos, destacando la característica más importante. La utilización de los adjetivos, ayudará a que los niños conozcan y distingan mejor a los diferentes personajes de la historia:
- Hombre de la piel de oso: el ratoncito valiente
- El demonio: el viejo león
- El anciano: el ratón mayor
- La hija menor: ratoncita presumida
- La hija mediana: ratoncita bella
- La hija mayor: ratoncita rosa
He pensado poner los personajes en forma de animales
en lugar de personajes humanos, ya que me pareció mucho más interesante, ya que
es un cuento dirigido para niños, y la adaptación de la que partíamos estaba
realizada por personajes humanos, por lo que los niños podrían conocer las dos
adaptaciones y ver el cambio de personajes.
También pienso que es una adaptación apropiada para niños entre 4 y 6 años, ya que se trata de una narración amplia, que los niños más pequeños no podrían seguir la historia de principio a fin.
En esta adaptación, he decidido quitar las situaciones que pueden resultar más “morbosas”, como puede ser el intento de ahorcamiento, la muerte de las hermanas…, ya que pienso que estas situaciones son demasiado agresivas, y puede provocar un cambio emocional en los niños, por lo que preferiría tratar estos temas de una manera más adecuada, para no trastocar la parte emocional en los niños y evitar que los niños imiten esas situaciones.
Por último, el lenguaje que he empleado en esta adaptación, es claro y sencillo, para que el niño pueda entenderlo en un tiempo record e identificarse con los personajes. También, he empleado palabras que pueden resultar más complejas para los niños, que se podrían sacar en el contexto de la frase, cuyo fin es enriquecer el vocabulario de cada niño.
A continuación podéis encontrar mi adaptación titulada “El ratoncito valiente y su capa de piel de oso”
ADAPTACIÓN DEL CUENTO:
Erase una vez un ratoncito muy valiente vestido de soldado y que luchaba por su país. Un día, terminó la guerra y tuvo que dejar de luchar con otros soldados ratoncitos.
El ratoncito valiente se puso muy triste, porque no sabía hacer otra cosa que ser soldado, por lo que decidió irse a un bosque a sentarse debajo de un árbol a pensar en su destino.
De pronto, escuchó los pasos de un león que le miraba fijamente. El viejo león empezó a hablarle, y le preguntó que por qué se llamaba el ratoncito valiente. Éste le contestó que era valiente porque a nada le tenía miedo, entonces el viejo león le propuso darle dinero para que no pasara hambre, pero a cambio le tenía que poner a prueba.
El viejo león pensó, pensó, pensó y se le ocurrió que el ratoncito valiente se podría asustar con un oso, por lo que de repente apareció un enorme oso que venía gruñendo hacia el ratoncito, pero no se asustó y fue a hacerle cosquillas, hasta que no pudiera más.
El viejo león quedó sorprendido de la valentía del ratón, y le puso otra prueba: el ratoncito valiente no podría lavarse, peinarse, cortarse el pelo o las uñas… durante siete años.
El ratoncito pensó lo que el viejo león le había propuesto, pero como era valiente aceptó la propuesta. El viejo león se quitó la capa que traía puesta de piel de oso, se la entregó al ratoncito valiente, y le dijo:
-"Si tienes esta capa sobre tu espalda y metes tu mano en el bolsillo, siempre lo encontrarás lleno de dinero."-
El viejo león desapareció dejando solo al ratoncito valiente, para que cumpliera su promesa. Se puso la capa que el viejo león le había regalado, y metió la mano en el bolsillo. Cuando metió la mano ¡OOOOH, SORPRESA!, dijo el ratoncito valiente al sacar la mano llena de dinero.
Con el paso de los años, la apariencia del ratoncito valiente era muy parecida a la de un monstruo. Todo el mundo que le veía, le tenía miedo por su aspecto.
Una noche, el ratoncito valiente se quedó a dormir en un establo, porque no encontraba ningún sitio para dormir. De pronto, el ratoncito valiente oyó a un ratón mayor llorar. Decidió acercarse y preguntarle qué le pasaba. El ratón mayor, le contó al ratoncito valiente que lloraba porque no tenía dinero y no podía dar de comer a sus tres hijas las ratoncitas que vivían con él.
El ratoncito valiente, decidió ayudarle con el dinero que sacaba del bolsillo de la capa del viejo león. El ratón mayor como recompensa, le pidió al ratoncito valiente que fuera con él a casa a conocer a las ratoncitas y poder elegir a una de ellas para casarse con ella.
Al llegar a casa del ratón mayor, la ratoncita bella y rosa que eran las hijas mayores, se asustaron al ver al ratoncito valiente, y no se querían casar con él. La ratoncita presumida que era la hija pequeña, al verle aceptó casarse con él, porque ella sentía que era un ratoncito bueno y valiente por ayudar a su padre, y no le importaba el aspecto que tuviera.
El ratoncito valiente, tenía que marcharse por tres años más para cumplir la promesa de los siete años con el viejo león. La ratoncita presumida y el ratoncito valiente se despidieron muy tristes.
Durante los tres años, el ratoncito valiente, viajó por el mundo haciendo el bien y siendo generoso con las personas que lo necesitaban.
Al cumplir los siete años de la promesa, volvió a encontrarse con el viejo león. El ratoncito valiente, había cumplido lo que el viejo león le propuso, por lo que ahora debía de lavarle, peinarle, cortarle las uñas… para quedar como un hermoso ratoncito valiente.
Entonces…
¡El ratoncito valiente ya era libre! Decidió ir a buscar a su novia la ratoncita presumida. Al llegar a la casa, estaban las tres ratoncitas. Las dos mayores al verle, fueron a llamar a su hermana la ratoncita presumida.
Ratoncita presumida bajó rápidamente por las escaleras para ver a su ratoncito valiente. Los dos se abrazaron y se dieron un beso. Hicieron una gran fiesta porque el ratoncito valiente había vuelto para casarse con la ratoncita presumida y para ser felices juntos.
y colorín colorado, este cuento se ha acabado, si quieres que te lo cuente otra vez cierra los ojos y cuenta hasta tres.